¿Quién le llena los bolsillos a la ultraderecha en España?
Aunque sus ideas tóxicas y discursos de odio ahora son parte del paisaje, su auge no es casualidad. ¿Quién está detrás de ellos? Sigue el rastro del dinero.
La semilla y el sustrato
Para que crezca la mala hierba, hace falta un terreno abonado por el descontento social y, claro, alguien que siembre la semilla. En el caso de la extrema derecha europea, incluyendo a Vox, encontramos dos tipos de padrinos: los dólares estadounidenses del trumpismo y los rublos rusos del Kremlin.
Dólares y rublos: el caso de Vox
Vox, antes de llegar al parlamento, recibió un millón de euros del Consejo Nacional de la Resistencia de Irán, una herramienta de intervención de Washington. Pero no solo mamaron de la teta americana; también se benefician de los rublos rusos. En 2013, Ignacio Arsuaga de Hazte Oír pidió 100.000 euros al oligarca ruso Konstantín Maloféyev, cercano a Putin y al lobby ultrarreligioso de EE.UU.
Alvise Pérez: ¿quién paga esta fiesta?
Alvise Pérez, adicto a teorías conspiranoicas y financiado por Hazte Oír, también se alinea con la financiación rusa. Sin embargo, su modus operandi es netamente trumpista, respaldado por figuras de la extrema derecha estadounidense.
No te equivoques, aunque la financiación venga de dos fuentes, la extrema derecha española baila al son de ambos pagadores. Mientras los dólares y los rublos fluyen, ellos siguen propagando su veneno.
