La Banda de los Cinco: Cómo los curritos le metieron un gol por toda la escuadra a los chupasangres de la banca

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La Banda de los Cinco: Cómo los curritos le metieron un gol por toda la escuadra a los chupasangres de la banca.

Hoy os traemos una historia que os va a hacer saltar del sofá y gritar «¡Toma ya!» como si España hubiera ganado otra vez la Eurocopa. Pero no, es algo mucho mejor: los currantes de a pie le han metido una patada en el culo a los tiburones de la banca. Y no hablamos de cualquier patada, sino de una en toda regla avalada por el mismísimo Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE). Agarraos, que vienen curvas:

La movida empezó con esas putas cláusulas suelo que los bancos metían de contrabando en las hipotecas. Ya sabéis, esa mierda que hacía que cuando los intereses bajaban, tú seguías pagando como si Jeff Bezos fuera tu casero. Una estafa en toda regla, vamos.

Pero he aquí que aparece en escena la Asociación para la Defensa de Consumidores y Usuarios de Bancos, Cajas y Seguros (Adicae), los auténticos Robin Hood del siglo XXI. Estos cracks decidieron que era hora de plantarle cara a los chupasangres y montaron una macrodemanda colectiva en nombre de 820 afectados contra 101 entidades bancarias.

Los tribunales españoles, más perdidos que un pulpo en un garaje, le pasaron la pelota al TJUE. Y aquí viene lo bueno: el Tribunal Europeo ha dicho que sí, que las demandas colectivas son legales y válidas para luchar contra los abusos bancarios. ¡En tu cara, sistema financiero!

Esto significa que ya no tendremos que enfrentarnos solos contra el ejército de abogados con corbata de los bancos. Ahora podemos unirnos y darles una paliza legal en toda regla. ¡El poder del pueblo, compañeros!

Y no os perdáis esto: el TJUE ha dicho que les importa un pimiento si hay muchas entidades y consumidores involucrados. Los derechos son los derechos, y punto pelota. Toma nota, capitalismo.

Así que ya sabéis, camaradas: si os han tangado con una cláusula suelo, con preferentes, o con cualquier otra jugada sucia de la banca, es hora de unirse y luchar. Porque juntos somos más fuertes que todos los yates de los banqueros juntos.

La lucha continúa, y esta vez, hemos ganado una batalla importante. Así que brindad con cerveza, que hoy celebramos que David le ha dado una hostia a Goliat. Y recordad: la unión hace la fuerza, y la acción colectiva es nuestra arma secreta contra los abusos del sistema.

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